Visitas

sábado, 27 de abril de 2013

Simplemente, ojalá

Con ver una foto tuya me basta para darme cuenta de lo que provocas en mí. Es increíble. ¿Cómo es posible causar tantas emociones con tan poco? Dejas sin preguntas a mis respuestas. Me fascina tu pelo, tu mirada, tu nariz, tu boca, tus brazos, tu cuerpo... tú entero me maravillas. Tan perfecto que asustas. 

Cuando te veo, cuando te miro, cuando nuestras miradas se cruzan y se mantienen durante unos instantes, instantes que se hacen eternos pues me pierdo en el marrón de tus ojos, y no me encuentro hasta que el sonido de tu voz sale de tus labios, entonces los observo y allí me vuelvo a perder entre vanos deseos y locas esperanzas, entre preguntas de "¿y si...?", entre ruegos y súplicas, entre la nostalgia y la ilusión de poder rozarlos durante unos segundos tan solo... Entonces sonríes y un haz de luz sale, iluminando mi mirada. Sin aliento, con el aire justo para no desplomarme frente a ti, te devuelvo la sonrisa, ese tipo de sonrisa que confiesa la pureza de un sentimiento, el cual no sabría definir ahora, pero que me encanta sentir. Y así, una y otra vez, desde hace mucho tiempo. ¿Cómo lo haces?. Eres una debilidad para mí, algo a lo que no podría rechazar, independientemente de las circunstancias. 

Y, es que, es tan fácil soñar... y tan bonito cuando lo hago contigo, que me resulta tremendamente complicado no hacerlo. Disfruto con tu presencia y eso, a día de hoy, no lo puedo negar. Ojalá algún día... simplemente, ojalá


martes, 2 de abril de 2013

Va por ellos

No sé exactamente qué hace que una amistad perdure. Supongo que es cuestión de que las dos personas realmente lo quieran así. Todos nos hemos llevado chascos alguna vez porque queríamos seguir manteniendo una relación, pero esta se va desmoronando conforme pasan los días, o bien, de repente un día se esfuma. Que si "a ver si nos vemos", que si "un día de estos quedamos", que si "no escuché tu llamada", que si "no leí tu mensaje", que si "tengo muchas cosas que hacer", y como estas, cientas de situaciones más... Y la verdad es que más de una vez lo he pasado mal dejando en el pasado a ciertas amistades, ya que no tenían futuro. ¿Por qué?. Simplemente lo sabes. Algo dentro de ti te dice que eso acabará... y así es. Y, también, más de una vez he tenido que hacer de tripas corazón para no coger demasiado cariño a una persona con la que sabía que no iba a llegar lejos, aunque esta es la parte más complicada, cuando intentas querer con el freno de mano echado.Y es que, por mucho que me diga "tienes que ser más fría para evitar coger tanto cariño a las personas" me cuesta bastante. 
A pesar de esto (que nos ha pasado a todos en algún momento) yo al menos les guardo un sitio en mi corazón a todos aquellos que, aunque fuera durante un día, formaron parte de mi vida y que, aunque fuera durante una hora estuvieron conmigo. A todos aquellos que, al fin y al cabo, me demostraron que eran especiales y que eran quienes debían cruzarse en mi camino para aprender algo nuevo que a día de hoy forma parte de mí. Por este motivo precisamente no guardo ningún tipo de rencor hacia nadie, faltaría más, en todo caso les guardaría nostalgia porque siempre da pena dejar a un lado a quien cogiste cariño en su día.
Así que ya me limito a disfrutar de aquellos que me dedican su tiempo e intento darles la mejor versión de mí. Así, si algún día se tiene que acabar, se quedarán con un bonito recuerdo. 



Hoy, estas palabras va por todas aquellas personas que se quedaron atrás en el camino y por aquellas otras que lo irán haciendo. Siempre me acordaré de vosotros, ya que no me olvido de quien algún día estuvo ahí, a mi lado, escuchándome, ayudándome o, simplemente, sacándome una sonrisa.